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Leire Díez, acusada de ser la “fontanera” del PSOE, admitió ante el juez haber tenido reuniones con Santos Cerdán y Antonio Hernando, donde entregaron audios del excomisario Villarejo.

Leire Díez, acusada de ser la “fontanera” del PSOE, admitió ante el juez haber tenido reuniones con Santos Cerdán y Antonio Hernando, donde entregaron audios del excomisario Villarejo.

Estos audios, que son perjudiciales para el PSOE, fueron compartidos con otras fuerzas políticas. Díez y su socio, Javier Pérez Dolset, están bajo investigación por posibles delitos de cohecho y tráfico de influencias, lo que arroja una sombra de corrupción sobre los encuentros políticos en cuestión.

Leire Díez, acusada de ser la “fontanera” del PSOE, admitió ante el juez haber tenido reuniones con Santos Cerdán y Antonio Hernando, donde entregaron audios del excomisario Villarejo.

Estos audios, que son perjudiciales para el PSOE, fueron compartidos con otras fuerzas políticas. Díez y su socio, Javier Pérez Dolset, están bajo investigación por posibles delitos de cohecho y tráfico de influencias, lo que arroja una sombra de corrupción sobre los encuentros políticos en cuestión.

Los implicados negaron cualquier vinculación adicional con el PSOE, a la vez que afirmaron que las grabaciones no guardan relación con la investigación en curso que también involucra a Alejandro Hamlyn, un empresario radicado en Dubai. La situación se complica al implicar a varios actores en un posible esquema de corrupción.

Leire Díez, acusada de ser la “fontanera” del PSOE, admitió ante el juez haber tenido reuniones con Santos Cerdán y Antonio Hernando, donde entregaron audios del excomisario Villarejo.

Estos audios, que son perjudiciales para el PSOE, fueron compartidos con otras fuerzas políticas. Díez y su socio, Javier Pérez Dolset, están bajo investigación por posibles delitos de cohecho y tráfico de influencias, lo que arroja una sombra de corrupción sobre los encuentros políticos en cuestión.

Los implicados negaron cualquier vinculación adicional con el PSOE, a la vez que afirmaron que las grabaciones no guardan relación con la investigación en curso que también involucra a Alejandro Hamlyn, un empresario radicado en Dubai. La situación se complica al implicar a varios actores en un posible esquema de corrupción.

La defensa de Díez ha argumentado que las grabaciones deben ser anuladas, alegando violaciones de privacidad. Esto añade una dimensión legal a la controversia, que podría afectar la credibilidad y la integridad de los procesos judiciales implicados.